Cuando la luna se envuelve de seda
la mar resplandece llena de encanto,
esperando una sirena y su dulce canto
para hechizar la noche dormida y queda.
Con esa luz que al firmamento enreda,
el corazón de un ruiseñor emite su llanto,
encerrándolo en un misterioso manto
que guarda la añoranza de su alameda.
De aquella arboleda tranquila y bella
donde un día con dulzura se enamoró
a la orilla de ese piélago de lindo resplandor.
Y las olas avivan el recuerdo de ella,
de esa mujer que tanto lo acaloró
al darle un beso en su alma de trovador.
A.V. 16-12-12
Poeta que sigan naciendo bellas palabras desde el mismo centro de tu corazón. Feliz Navidad y felices días del resto de tus días.
ResponderEliminarUn abrazo.
Y ese recuerdo de aquella mujer quedara siempre en su corazon . Te deseo una vida llena de felicidad y amor, y que la luz de tu alma de poeta brille siempre. Besos amigo
ResponderEliminarTe deseo una muy Feliz Navidad.
ResponderEliminarBesos
Hoy la luna se viste de seda entre tus palabras y las olas fluyen en la humedad de tu poema, muy bello.
ResponderEliminarFeliz navidad, amigo.
Un beso.
Paso a dejarte mis saludos en estas Fiestas y mis mejores deseos de felicidad para el Nuevo Año. Además, con mucho cariño quiero compartir contigo el Premio Dardos.
ResponderEliminarUn inmenso abrazo y todo mi aprecio para ti.
Gracias por tu amistad!!