Una linda flor de romero
ha embelesado mi corazón,
con ese cuerpo hechicero
lleno de ambrosía y pasión.
Su talle de nácar y miel...
de verde se ha vestido,
para hacer de su fina piel
el dulce sueño de Cupido.
Con esa hermosa figura
revoloteando al viento...
convierte su hermosura
en el anhelo de mi aliento.
¡No! no puede ser...
que exista tanta belleza
en esa preciosa mujer
ni en toda la naturaleza.
Y sus piernas de caramelo
envueltas en el tul del sueño...
son dos ángeles del cielo
que andan con aire risueño.
Pero... lo más cautivador
de esa niña nacarada...
es el apasionante resplandor
del embrujo de su mirada.
A.V. 28-11-13
"por ti y para ti...
pues sin ti nada ocurriría"
No es de extrañar que ante la belleza de tu musa, estés siempre tan inspirado.
ResponderEliminarBellísimo poema.
Un beso Antonioe.
!! cuántos sentimientos Antonio¡¡¡ qué bello.
ResponderEliminarFelicidades¡
Un abrazo.
Muy bello y melodioso poema, tus palabras danzan en los sentidos de las que te leemos eres realmente genial querido antonioe.
ResponderEliminarBesos feliz fin de semana.
Versos tan bonitos nacen de una bella inspiración !!
ResponderEliminarBesos
Me encantó!!! "Niña nacarada" que bellas y poéticas palabras.
ResponderEliminarUn abrazo.
Mi querido Antonio, me gusta ver como tu corazón desborda ese amor por tu bella niña.
ResponderEliminarBesos y un buen fin de semana
La bella flor de romero ha adornado este poéma...
ResponderEliminarUn abrazo.