Una niña hermosa ha venido
envuelta en un vestido verde...
ha sido enviada por Cupido...
para ver si me prende.
Su talle es... de terciopelo...
un sabroso bombón...
de ambrosía y caramelo,
que va rebosando pasión.
Y sus piernas de azucena...
cubiertas con un tul de amor;
ellas son... la preciosa almena
donde guarda su fervor.
En un instante... sucedió...
con una emotiva mirada...
su firmamento se abrió
y me mostro... su morada.
Jamás contempló mi aliento
tal cantidad de hermosura...
Jamás vi un pensamiento
tan colmado de dulzura.
Helena... eres bella entre las
bellas,
con esa figura de nácar y miel...
que está cubierta de estrellas
para alumbrar la ternura de tu piel.
A.V. 21-5-13
"Al ruborizarse tu mejilla...
ha comprendido mi alma...
que eres la linda chiquilla
donde descansa mi calma."