Eres nena mi lucero mañanero
ese que guarda en tu bella mirada
la pasión de un alma enamorada
y un hermoso y dulce te quiero.
Y seguirás siendo mi alborada,
ese amanecer dueño de mi ser
y hechicero de ese precioso querer
que me diste en tu linda morada.
Eres chiquilla una joya de oriente
un tesoro tan bonito y primoroso
que engalana mi espíritu dichoso
con ese resplandor tan envolvente.
Y que mañana me dará su amistad,
esa fortuna que anidará en mi corazón
haciendo de él un tierno rincón
Y navegará… y volará… y soñará
pensando en esa sublime pasión
que a los dos nos llenará de ilusión
con la alegría que de él brotará.
Con tu belleza y mi cantar
nuestro dulce amor
es un lindo despertar.
A.V. 20-8-12